22 de octubre de 2021

El surealismo como una actitud ante la vida.


Queridos amigos, hoy repito esta entrada a propósito de la exposición de  Magritte en el Thyssen. Empezaba con esta famosa frase del artista, aunque a él le gustaba que le situaran no entre los artistas, sino entre los pensadores.

Espero que os guste. 

El surrealismo es revolucionario ya que es enemigo irreductible de todos los valores ideológicos burgueses que retienen al mundo en las horribles condiciones actuales.

René Magritte

Los amantes de Magritte 1928

El falso espejo 1928

El gran siglo de Magritte.

Salvador Dalí, "Sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes del despertar", 1944

Al término de la primera Guerra Mundial la Europa sobreviviente se sentía abrazada por la muerte y la devastación, esto significó el comienzo de una serie de transformaciones que, inscritas en la nostalgia, provocaron en los artistas el deseo de revivir la existencia que les podría ser arrebatada de un momento a otro. 

La poesía, en muchos casos, fue la nueva herramienta para poder sobrevivir en un mundo convulsivo, y se convirtió en el arma que se fabricó a partir del deseo de manifestar la inconformidad contra las "racionales" estructuras de poder.

El Surrealismo no fue un movimiento artístico más, sino una actitud ante la vida que ha dejado una marcada huella en todo el arte posterior.

La finalidad del surrealismo era transformar la vida a través de la liberación de la mente del ser humano de todas las restricciones tradicionales que la esclavizan: La religión, la moralidad, la familia y la patria se convierten así en instituciones a revisar. 


Salvador Dalí. Rostro del Gran Masturbador, 1929.

El surrealismo se aleja del aburrimiento literario y se identifica con la magia de lo irracional. 
El lenguaje suscita pasión e idea, puesto que los conceptos brillan, innovan, y los sentimientos son su vigor. Es un lenguaje pasional de pensamiento vivo y original. Hay una innovación de teorías y una profundización en las que inspiran. 

Guillaume Apollinaire pintado por Jean Metzinger

La palabra surrealismo tiene su origen en 1917, con el escritor Guillaume Apollinaire, aunque el término sólo adquiere el sentido atribuido hoy, más tarde, en 1924, en el Manifiesto del Surrealismo, inaugurado por André Breton y su amigo Philippe Soupault. 


André Bretón, El manifiesto del Surrealismo

Inicialmente, el surrealismo funciona más como una expedición literaria, puesto que no había un programa surrealista para las artes visuales hasta que Breton escribe Surrealismo y pintura, en 1925. Tampoco había cualquier espacio de exposiciones específicamente vinculadas al grupo antes de la inauguración de la Galería Surrealista, en 1926. 

Joan Miró
Giorgio de Chirico
Francis Picabia
Las prácticas del grupo de los surrealistas no respondieron a ningún programa del Estado francés. Por el contrario, se trata de una agrupación de vanguardia, esto es, reducida en cantidad de miembros, radical en sus planteos estético-políticos y antiinstitucional en lo que a su inscripción se refiere. 

Pero a diferencia de otros grupos vanguardistas, al evitar toda normatividad el surrealismo fue un movimiento bien heterogéneo en términos estilísticos y disciplinares. 


Remedios Varo

Los escritores, pintores, poetas y fotógrafos de nacionalidades diversas y activos en París que adscribieron al "Manifiesto del surrealismo", redactado por André Breton en 1924, y que participaron de la primera revista surrealista lanzada ese mismo año, La Révolution surréaliste, proponían una exploración radical de lo inconsciente. 

Oscar Dominguez

Félix Labisse

Roberto Matta

El manifiesto (un texto de 40 páginas) definía al surrealismo de este modo: 

"Automatismo psíquico puro, por cuyo medio se intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral". 


Una de las ilustraciones realizadas para el poema "Unión Libre" de André Breton.

El poema "Unión libre", de André Bretón, consiste en una serie de versos paralelísticos, en los que se repite un sintagma nominal formado por "mi mujer" y uno o varios sintagmas preposicionales que contienen otros sintagmas preposicionales:

"Mi mujer de cabellera de llamas de leña
de pensamientos de relámpagos de calor
de talle de reloj de arena
Mi mujer de talle de nutria entre los dientes del tigre"

"Incluso está permitido dar el título de POEMA a aquello que se obtiene mediante la reunión, lo más gratuita posible de títulos y fragmentos de títulos recortados de los periódicos diarios" (André Breton, Manifiesto del surrealismo, 1924):





Para conseguir esa finalidad de liberar al ser humano de las represiones personales y sociales, los surrealistas se valieron de una serie de técnicas concretas, todas ellas buscando la libertad de creación y olvidando la razón. 

Pintores surrealistas (aunque no todos, podéis mirar las pintoras surrealistas I, II,II,IV de este blog):
André Breton,
Miró,
Giorgio de Chirico,
Francis Picabia,
Paul Klee,
Roberto Matta,
Leonora Carrington,
Salvador Dalí,
Paul Delvaux,
Yves Tanguy,
Renée Magritte,
André Masson,
Max Ernst,
Jean Arp,
Claude Cahun,
Paul Nougé


Max Ernst

Paul Klee

Leonora Carrington

Claude Cahun, pseudónimo de Lucy Renée Mathilde Schwob, fotógrafa y escritora francesa.
Ives Tanguy, "A través del pájaro, a través del fuego, pero no a través del cristal" (1943).


Paul Nougé, "La profundidad del sueño"

En la literatura generó una revolución en el lenguaje y la aportación de nuevas técnicas de composición. 

A partir de 1925, a raíz del estallido de la guerra de Marruecos, el surrealismo se politiza; se producen entonces los primeros contactos con los comunistas, que culminarían ese mismo año con la adhesión al Partido Comunista por parte de Bretón.

Entre 1925 y 1930 aparece un nuevo periódico titulado El Surrealismo al servicio de la Revolución en cuyo primer número Louis Aragón, Buñuel, Dalí, Paul Éluard, Max Ernst, Yves Tanguy y Tristan Tzara, entre otros, se declaran partidarios de Breton. 

Entre los años 1938 y 1940, con el apoyo del presidente de la República Mexicana Lázaro Cárdenas del Río (1895-1970), cuyo gobierno acogió a grandes personajes de la cultura española durante la guerra Civil Española de 1937, llegó en 1940 la española Remedios Varo (1913-1963), quien ingresó al surrealismo de la mano de Paul Eluard y André Breton y fue la introductora de la pintura surrealista en México.

Remedios Varo, Tránsito en espiral

Paul Delvaux

El surrealismo en la literatura hispánica.

El surrealismo fue seguido con interés por los intelectuales españoles de los años 30. Existía el precedente de Ramón Gómez de la Serna, quien utilizaba algunas fórmulas vinculables al surrealismo, como la greguería. El primero en adoptar sus métodos fue José María Hinojosa, autor de La flor de Californía (1928), libro pionero de prosas narrativas y oníricas.

Varios poetas de la generación del 27 se interesaron por las posibilidades expresivas del surrealismo. 
Su huella es evidente en libros como:

*.- "Sobre los ángeles y en Sermones y moradas" de Rafael Alberti
*.- "Poeta en Nueva York" de Federico García Lorca y 
*.- "Un río, un amor y Los placeres prohibidos" de Luis Cernuda. 


En los medios audiovisuales








"El surrealismo no era para mí una estética, un movimiento de vanguardia más, sino algo que comprometía mi vida en una dirección espiritual y moral. No pueden ustedes imaginarse la lealtad que exigía el surrealismo en todos los aspectos."
Luis Buñuel

Gracias a El  rincón de mis desviaros, y a mi amiga Inma, de donde saqué el contenido de esta entrada.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Como todo blog, permite la inclusión de comentarios, propuestas, opiniones, críticas, los cuales se publicarán, siempre y cuando a criterio de la Dirección de la galería, no tengan carácter claramente ofensivo o de falta de respeto a las personas o al hacer de los artistas e integrantes de este proyecto.