El Castillo de Santa Ana, en Roquetas de Mar (Almería) fue el escenario de la presentación del libro
Lo demás es oscuridad.
¿Y si el faro
con su luz atornillada,
con su absorto girar de parpadeos,
se cegase de pronto?....
(Andrés Newman, del libro Mistica abajo)
Han participado en él escritores y artistas de muy distinta procedencia: poetas. fotógrafos, pintores, ceramistas, narradoras, grabadores, escultoras, ilustradores... coordinados todos por Pilar Quirosa- Cheyrouze y Mario Sanz Cruz, farero y escritor, que ha publicado en estos últimos años, en relación con el tema, otras obras: Faro de Mesa Roldán. Apuntes para una historia (IEA Llmería 2003) y Faros de Almería. Mucho más que señales marítimas, publicado también por IEA, Autoridad portuaria, Almería en el año 2007.
Os dejo un fragmento de uno de los cuentos del libro:
…su padre, aunque siempre fue más bien serio, era un héroe para ella. Desde muy niña le acompañaba en el trabajo, seguía con interés cada movimiento, cada gesto que su padre realizaba en el cuadro de control, en la linterna, con la óptica o con las lámparas. Limpiaba con él los cristales de la linterna y quitaba el polvo de las lentes. Desde el balconcillo miraba al cielo, después la veleta y luego al mar, y su padre sentenciaba: “Despejado, Noreste fuerza tres, marejadilla”…
Mario Sanz Cruz, No quiero casarme con un farero, pág. 251.
Recuerdo ese salitre de la mar
oscurecida, azul
bajo la lenta barca de la luna.
La carretera híbrida
hija de la serpiente y de las águilas,
coronada en su frente por un faro
en donde la nostalgia se asentaba
irradiando la luz a través de las olas.
Tú esperabas a un lado
De la cascada ebria que cruzaba la noche.
Yo volaba hacia ti, sin miedo, sabedora
de que el último rayo de esa luz
cegaría de barcas la ensenada
y ahí, como se esparce la arena por el viento,
tus brazos, aún desnudos, aferrados
tan fuertemente a mí, que ni el tiempo sería
capaz de derrotarnos ni la ausencia.
XIV
……………
¡Faro de Mesa Roldán!
Desde tu torreón de piedra
¡Qué bonito se ve el mar!
Los azules de Agua Amarga
los blancos de Carboneras
los ocres de Argamasón
ceñidos contra la sierra
y como verde milagro, el verde
de retamas y chumberas.
Entre los montes y el mar
solo tú, con tu silencio,
faro de Mesa Roldán.
Ana María Romero Yebra, pág. 51
Enhorabuena a todos.
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