Hasta el 12 de abril del 2020, si no hay un aplazamiento, el Palacio de Gaviria nos deleita con una exposición dedicada a una de las sagas más importantes de la pintura flamenca.
La exposición Brueghel, Maravillas del arte flamenco, nos muestra cerca de un centenar de obras de los ocho miembros más destacados de la familia de pintores flamencos, Brueghel, lo que nos traslada a los siglos XVI y XVII.
Pieter Brueghel el Viejo fue el que inicio la saga, y le siguieron sus hijos Pieter Brueghel el Joven y Jan Brueghel el Viejo. La saga continuará con el hijo de este último, Jan Brueghel el Joven, el cual tuvo once hijos, cinco de los cuales se dedicaron a pintar siguiendo el estilo de sus antecesores, Jan Pieter Brueghel, Abraham Brueghel y Ambrosius Brueghel.
Fue un personaje bastante enigmático que salió a la luz pública al establecerse en Amberes, ciudad que en esa época era lugar de crecimiento del renacimiento europeo.
El patriarca de la familia, Pieter Brueghel el Viejo, pintor y grabador, se unió al club de maestros artistas de la pintura flamenca, del que, entre otros, formaban parte Pedro Pablo Rubens y Hans Memling, así como sus dos hijos Pieter y Jan.
Vivió una temporada en Italia, pero pronto se trasladaría a Bruselas, ciudad que en esa época era un centro artístico importante; además la nobleza urbana tenía mucho poder adquisitivo, lo cual favorecía la venta de las obras.
De hecho, la mayoría de sus cuadros pertenecen a colecciones privadas que no fueron mostradas en público. ´
Su fama inicial es debida a la intervención de su hijo Pieter Brueghel el Joven, el cual para difundir la obra de su padre. se dedicó a hacer copias de sus cuadros, como es el caso de Trampa para pájaros (1601), a continuación.
Su estilo era icónico, con obras simbólicas y muy arraigadas en la tradición local.
Le gustaba representar la forma de vida de la gente de las zonas rurales, en sus oficios y actividades diarias, con obras llenas de detalles y realismo.a estaba fascinado con la pintura de El Bosco, lo cual se deja ver en muchas de sus obras, como en este Baile de boda campesina al aire libre.
Esto dio lugar a crear una obra llena de contenidos morales.
Los paisajes son importantes en la obra del artista ya que estaba fascinado con la naturaleza. Paisajes nevados, alegorías paganas, pecados escatológicos y muchas flores del mal, son los temas que toca en su producción.
Jan Brueghel el Viejo, segundo hijo de Pieter Brueghel el Viejo, también continuó con la técnica y temas del patriarca de la saga, pero con más libertad a la hora de interpretar los temas.
La dinastía Brueghel siguió con el hijo de este último Jan Brueghel el Joven, el cual heredó el estudio de su padre e ingresó en la Guilda de San Lucas, que era uno de los gremios de artistas y artesanos flamencos más importantes de la época. A él pertenece la siguiente obra, Paisaje de colinas con viajeros.
Este artista, además de por su producción, alcanzó bastante éxito vendiendo los cuadros heredados de su padre
La exposición te muestra también las obras de los hijos de este último, Jan Peter Brueghel, con pinturas muy centradas en el género floral, y Abraham Brueghel, que se dedicó más a los paisajes, aunque también abordó el tema de bodegones de flores y frutas.
Abraham Brueghel. Naturaleza muerta grande con frutas en un paisaje. |
La exposición Brueghel, Maravillas del arte flamenco, nos muestra cerca de un centenar de obras de los ocho miembros más destacados de la familia de pintores flamencos, Brueghel, lo que nos traslada a los siglos XVI y XVII.
Una oportunidad única para conocer la obra de esta saga holandesa que marcó la historia del arte europeo entre los siglos XVI y XVII. La muestra, comisariada por Sergio Gaddi, estará compuesta por cerca de un centenar de piezas representativas de este linaje de pintores.
Sería una pena no poder visitarlo. Pero podéis hacerlo a través de esta pagina del blog de Tíltide.
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